El recuerdo de un instante...

Me asomo a la ventana, eres la chica de ayer.
Demasiado tarde para comprender.
Mi cabeza da vueltas persiguiéndote.
Mi cabeza da vueltas persiguiéndote.

Esta bonita canción de Nacha Pop sonaba justo enfrente de donde descansaba, dentro del mismo Palacio de Cristal que es sin lugar a dudas el edificio más sobresaliente de los jardínes del Parque del Retiro en Madrid que junto con el lago artificial, fue levantado en 1887.

Era una tarde cualquiera de un día cualquiera de tantos en los que el calor agobia a los visitantes de la ciudad que, después de un largo día de visita a los museos y  monumentos característicos, acabamos descansando en un banco del famoso Parque del Retiro.

Estaba yo sentado en uno de los bancos que hay junto al lago, cerca de la puerta del Palacio de Cristal y seguía escuchando la música de mi tiempo. Fueron buenos tiempos, quizás los mejores que mi generación vivió. 

Recordar los buenos tiempos en los que comenzábamos nuevos proyectos casi a diario, tiempos ilusionantes, reivindicativos... aquella música me traía tantos recuerdos de mi pasado y por alguna razón que no entiendo bien, me los trajo al presente mostrándomelos ahora.. en este banco del Retiro.

Lo pasaba bien pero mejoró aún más, llegó el mejor momento del día cuando comencé a ver como personas, muchas personas entraban y salían del Palacio que se había vestido con el sabor de los años 80 y 90 para albergar a jóvenes y no tanto que disfrutaban con esta música y vestidos a la moda de aquel tiempo e imitando a los ídolos del momento (Travolta, Olivia, The Eagles y su Hotel California, Supertramp, Carlos Santana).

 

Estaba siendo ya una noche mágica, nada más que por haber presenciado estas escenas que me hicieron recordar tiempos pasados, habría merecido la pena el viaje pero aún faltaba la guinda.... 

Se acercó despacio, fumaba un cigarrillo, tomaba el aire puro del parque. La visión era increíble!! no lo podía creer!!... paró finalmente al lado de mi banco, junto a la orilla del lago, estaba sola, brillaba espectacularmente!!

No podía dejar de mirarla, era ella, Olivia.

Estaba allí, cerca de mí, en el parque, en esta reunión que se había convocado en el Palacio de Cristal... fue inolvidable, me encantó poder recordar el maravilloso espectáculo que presencié algún año antes en el Teatro Lope de Vega aquí mismo, en Madrid.

Ella era, para mí, la auténtica y genuina Olivia!! protagonizó el Musical Grease que marcó la diferencia de una época.

Maravillosa y genial en su trabajo, espectacularmente agradable como persona. No dudó en darme un autógrafo que guardaré para siempre como remuerdo del instante en que la vi aparecer desde el Palacio de Cristal y con el reflejo de la luna sobre el lago.